Exceso de normas se atraviesa en el avance del ‘nearshoring’

Las empresas alrededor del mundo buscan dejar su dependencia de almacenamiento, alistamiento y distribución en un solo país. 

La industria ha tenido grandes cambios en el último lustro. El escenario mundial se ha visto sometido a tensiones geopolíticas que han puesto en jaque la cadena de suministro global. Esto además apalancado por el suceso de la pandemia y la guerra de Ucrania, que sometieron a las empresas a buscar nuevas soluciones para evitar la dependencia de la producción, alistamiento y distribución en un solo país.

Allí nació la tendencia del nearshoring o deslocalización cercana, la cual ha ayudado a cambiar esos patrones de abastecimiento de productos a nivel mundial, generando una nueva cadena multinacional que podría salvar a empresas cuando estas situaciones se presenten.

Por ejemplo, algunos casos de éxito han sido Estados Unidos, país que en la búsqueda de desacoplarse de China, “viene fortaleciendo el Tratado México-Estados Unidos-Canadá (TMEC). Por su parte, China, avanza en el fortalecimiento de su relación con Asia, generando un mayor dinamismo en el mercado intrarregional”,señala el presidente ejecutivo de Analdex, Javier Díaz.

Además, la Unión Europea avanza en un fortalecimiento de su mercado único y “negocia un Acuerdo de Inversión Unión Europea-China, que les permita a las empresas europeas un mayor acceso al mercado chino, eliminando o reduciendo los requisitos para las empresas conjuntas”, menciona Díaz.

En medio de esta transformación, América Latina se ha ido consolidando como un destino apetecido por su ubicación geográfica. “Se ha convertido la tendencia de regionalización del comercio como una alternativa que permite lograr una mayor eficiencia en el suministro de mercancías debido a sus características de mayor resiliencia y autosuficiencia”, dice el dirigente gremial.

Ahora bien, para cumplir con la demanda de servicios que requieren la compañías, los países de la región deberán cumplir una serie de requisitos, para sobresalir unos sobre otros.

En el caso de Colombia, la carrera por estar entre en el radar de las multinacionales, ha ido más lenta. Esto se debe al marco regulatorio y a los costos en el país, convirtiéndose en todo un reto poder formar parte de este cambio en la cadena global.

“Para que esto sea exitoso se requiere desregular el sector de comercio exterior en nuestro país. En Colombia el sector está sobreregulado, al detalle, con sanciones estrambóticas por errores formales”, indica Díaz.

Por eso, el experto recomienda hacer más ‘fácil’ las operaciones en Colombia y mucho más barato, pues según la última encuesta logística del Departamento Nacional de Planeación (DNP) en 2020, los costos logísticos en el país son superiores a los de los competidores en la región, sobre todo en transporte y almacenamiento.

A esto se les suman “los tiempos y procesos aduaneros, que son absurdamente complicados y costosos. Desaduanar un contenedor en Colombia se mide en días, cuando los competidores lo hacen en horas, en Panamá, en minutos”, remarca el presidente del Analdex.

Pese a las dificultades, la apuesta por la diversificación de proveedores es una realidad, y Colombia deberá aprovechar su oportunidad, gracias a su potencial y cercanía con Estados Unidos para profundizar el comercio y la inversión a partir de la amplia red de acuerdos comerciales.

“Para lograrlo, el país debe avanzar en una agenda que apueste por un mayor aprovechamiento de acuerdos comerciales. Aspectos como acumulación de origen regional con destino a Estados Unidos permitirían incentivar mayores encadenamientos productivos y procesos de valor agregado que generen una mayor inserción en las cadenas de valor”, recomienda.

Por otro lado, Díaz percibe desde el punto de vista empresarial, que la tendencia del nearshoring puede ubicar al país en un lugar estratégico en la proveeduría de productos y servicios a los mercados de Estados Unidos y la Unión Europea.

“Es evidente el interés creciente de empresas multinacionales estadounidenses y canadienses que han mostrado en relocalizar sus redes productivas internacionales ubicadas en destinos lejanos (principalmente Asia) hacia países cercanos en América Latina y el Caribe, generando beneficios para la región”, dice.

Según el BID, la ganancia potencial para la región de la tendencia de nearshoring podría representar un aumento de hasta US$78.000 millones en nuevas exportaciones de bienes y servicios.

Profesionales de TI, escasos

De acuerdo con EY, la principal razón de la transformación digital en las compañías es la simplificación y eficiencia de los procesos. Sin embargo, de cara al mercado laboral, según Page Consulting de PageGroup-, la búsqueda de profesionales tecnológicos es cada vez más compleja; el talento TI se destaca por su alta demanda y escasez.

Así, las empresas de nearshoring “garantizan el compromiso de sus equipos con el proyecto. Al contar con profundos conocimientos en diversos sectores, estas funcionan como verdaderas aliadas: el éxito de sus clientes es también su éxito”. 

Tomado de: Portafolio