¿Hay o no buques para exportar?

En noviembre los exportadores colombianos representados por la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex) señalaron que la menor frecuencia de buques cargueros hacia los puertos colombianos, en especial a Buenaventura, estaba provocando el incumplimiento de compromisos adquiridos con sus clientes en el extranjero.

Según Javier Díaz Molina, presidente del gremio, estas dificultades persisten, debido a las fusiones e integraciones de las grandes líneas navieras y a la construcción de barcos más grandes lo que genera el fenómeno que afecta no solo a los exportadores nacionales. Esa transformación de la industria está llevando a que haya menos frecuencias de embarcaciones llegando a los puertos.

Y es que en julio del año pasado, Cosco Shipping compró a OOCL, y en 2017 se conoció la adquisición de Hamburg Süd por Maersk.

Además, hay tres alianzas compitiendo: 2M Alliance que integran Maersk-Hamburg Süd y MSC; The Alliance conformada por ONE: NYK, MOL y “K” LINE; Yang Ming; y Hapag Lloyd-CSAV-UASC; y Ocean Alliance de la que hacen parte CMA CGM-APL, Evergreen y Cosco-OOCL.

La incertidumbre

Frente a este coyuntura, las mayores inquietudes las planteó Gustavo Gómez Montero, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Café de Colombia (Asoexport), quien sostuvo que la percepción, actualmente, es que hay una reducción de servicios y de rutas (ver ¿Qué sigue?).

“Cada vez es más complejo encontrar espacio en los buques o en muchos casos ni llegan a Buenaventura y termina el café más tiempo del proyectado en el puerto generando mayores costos. Lo que nos ha salvado es que en estos primeros meses del año no hay grandes volúmenes para despachar”, explicó el dirigente.

El señalamiento de Asoexport contrasta con el reporte de exportaciones de café en enero de este año, entregado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), en el que se apreció un aumento en valor (2 %) y en el volumen (8,8 %).

Mientras en enero de 2018 las ventas externas del grano sumaron 74.254 toneladas por 247,01 millones de dólares en el mismo mes de este año se enviaron 80.811 toneladas por valor de 252,03 millones.

Adicionalmente, en las cuentas de la Federación Nacional de Cafeteros en lo que va de octubre de 2018 a febrero 2019 (es decir en lo corrido del año cafetero), las exportaciones del grano fueron 5,99 millones de sacos, un 6 % más frente a los 5,65 millones de sacos despachados entre octubre de 2017 y febrero de 2018.

Otros factores

Para Guillermo González Larsen, presidente de la junta directiva de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional (Fitac), gran parte de las inquietudes de los exportadores tiene que ver con los trámites antinarcóticos a los que debe ser sometida la mercancía.

“Un contenedor que no tenga asignada una cita o no sea liberado por la autoridad antinarcóticos se queda en tierra así tenga cupo en el barco”, manifestó el dirigente, quien agregó que ya hay acercamientos entre empresarios, autoridades y responsables del puerto de Buenaventura para intentar una coordinación que permita sortear estas dificultades.

Sobre el menor arribo de embarcaciones a los puertos colombianos, González dijo que la Asociación Nacional de Agentes Navieros (Asonav) no tiene quejas contra las líneas.

No obstante, reconoció que el año pasado se quedaron 1.500 contenedores de café en tierra y algo similar ocurrió con azúcar, pero atribuyó esas situaciones a la concentración y alta demanda que tiene el terminal marítimo de Buenaventura, así como a las complicaciones que en ocasiones se observan en la asignación de citas.

Fuente: El Colombiano