Visión Colombia 2019: Perspectivas frente a los acuerdos comerciales
A menos de un año de cumplir la meta del programa lanzado por el Departamento Nacional de Planeación denominado Colombia Visión Centenario 2019, vale la pena preguntarse qué tan lejos está el país de esas metas soñadas y particularmente en el ámbito de la relación internacional que quería este plan para Colombia: una meta de inserción fuerte en el mercado mundial.
Si hoy se hiciera ese alto en el camino, efectivamente se aumentaron los nexos de Colombia con el mundo en materia comercial, pasamos de tener dos acuerdos comerciales en el contexto del libre comercio en el año 2000, donde se planteó el escenario futuro para el país, a hoy tener 16 acuerdos comerciales que buscan facilitar y movilizar nuestros productos y servicios al mercado internacional. Estadísticamente pasamos de exportar 21 mil millones de dólares en 2005 a 37 mil millones de dólares en 2017 con una dependencia concentrada en los recursos minero-energéticos que fluctúan entre el 50% y 55% del total de las exportaciones del país en ese periodo de tiempo.
Sin embargo, cuando se miran en detalle las metas propuestas en esta visión, se buscaba fortalecer la relación con Europa y Asia, y dentro del continente, ampliar la relación en centro y Suramérica.
La realidad hoy, es un Asia lejano, donde se hace evidente una muy buena relación comercial con China, más de importaciones que de exportaciones, y un mercado asiático todavía inexplorado por condiciones de acceso a los mercados que todavía no se han podido cumplir en el contexto colombiano, háblese en este sentido de regulaciones y restricciones que impiden que los productos puedan ser comercializados de manera exitosa en este continente y a pesar de tener un acuerdo comercial suscrito con Corea del Sur, donde el foco de acción está en la industria avanzada y de alto nivel de desarrollo, donde Colombia aún no puede competir.
Por otro lado, y a pesar de tener actualmente un acuerdo comercial suscrito con la Unión Europea que busca facilitar el libre comercio, aún Colombia está distante del mercado, por las mismas condiciones de acceso que representa el mercado asiático, condiciones y restricciones de tipo no arancelario (barreras técnicas) que, a pesar de la existencia del acuerdo, aún el proceso de inserción es débil. En el año 2000 las exportaciones de Colombia hacia el mercado Europeo era de 2 mil millones de dólares alcanzando un pico importante en el 2013 de 10 mil millones y a pesar de que se inició el acuerdo de libre comercio en este año, las exportaciones bajaron a tener en el 2017 un valor de 6 mil millones de dólares, lo cual efectivamente sugiere si efectivamente con el acuerdo de libre comercio se buscaba aumentar las exportaciones hacia la Unión Europea, con una tendencia particularmente común: dependencia de recursos minero energéticos que fluctúa en este periodo de tiempo entre el 30% y 40% del total de las exportaciones.
Si la meta era aumentar nuestra participación e inserción en el mercado internacional, hoy vale la pena preguntarse si la apuesta es por el valor agregado o por el ‘commodity’, tendencia que se ha mantenido diferente a la apuesta de la visión centenario y que a hoy no ha cambiado por la dependencia de los recursos minero energéticos, habrá que esperar si con la Visión Colombia 2032 se lograrán mejorar los niveles de competitividad y de diversificación para posicionar a Colombia como una economía realmente emergente y de categoría mundial.
Por: Andrés Mauricio Castro, Decano de Negocios Internacionales Universidad Piloto de Colombia