Desarrollo de las Relaciones Comerciales Entre Estados Unidos y China
El representante de comercio de los Estados Unidos Robert Lighthizer, realizó una declaración con respecto a las medidas planeadas por la administración de Trump en respuesta a la decisión de China que causaría daños a la economía estadounidense, se planea instaurar un arancel a los productos chinos por US$200 billones adicionales a una tasa del 10%, finalmente se conoció que se encuentra listo el segundo tramo de aranceles a importaciones chinas, en el cual se afectaran US$16.000 millones de dólares con un arancel adicional del 25%, el cual entrará en vigencia el 23 de agosto.
Según el representante Lighthizer estas acciones tienen el objetivo de proporcionar más herramientas a la administración para influir a China a cambiar sus políticas y conductas perjudícales, abrirse a una verdadera competencia de mercados y adoptar políticas que conduzcan a mercados más justos para todos nuestros ciudadanos, el gobierno estadounidense se mantiene en que han sido claro los cambios específicos esperados por China, sin embargo, se han presentado represalias contra los negocios de Estados Unidos.
Al mismo tiempo China anuncia más aranceles a Estados Unidos, valorados en US$60.000 afectando 5.207 ítems, desde gas natural licuado hasta aeronaves, afirmando que no daría pie atrás en su conflicto con el gobierno estadounidense y la implementación de estas nuevas tarifas aplicarían a partir del 23 de agosto.
En consecuencia, los efectos de la guerra comercial se empiezan a notar en Estados Unidos como el caso de la compañía Element Electronics en Carolina del Sur la cual dice que cerrara su planta debido a los aranceles de Trump, efecto de las nuevas tarifas recientes e inesperadas de productos importados desde China, lo que terminaría con el cierre de 126 puestos de trabajo. Adicionalmente se conoció la noticia de la cancelación de planes para construir dos reactores nucleares en el área con lo que se perderían 5.000 puestos de trabajo en construcción.