Buenos vientos en las ventas externas hacia países asiáticos

El Lejano Oriente se acerca y se interesa cada vez más en los productos nacionales. Así lo demuestran las más recientes cifras de exportaciones del Dane, en las cuales sobresalen los aumentos de más de 80% en las ventas a China y Corea del Sur, al igual que los incrementos con Turquía (44,3%) e Israel (154,2%). Y aunque la cifra es aún baja (US$58,8 millones), lo exportado a Emiratos Árabes Unidos avanza con buen ritmo, con un alza superior al 500%.

“Hacia Corea del Sur, el incremento se debe principalmente a hullas, café y ferroníquel”, manifestó Javier Díaz Molina, presidente de Analdex. El valor de lo exportado a Corea del Sur fue de US$190,3 millones.

En el caso de las ventas a China, que llegaron a US$1.057 millones, entre enero y abril, un informe de Analdex explica que el aumento se dio por la subida en combustibles (87,8%); fundición, hierro y acero (172,1%); metales y sus manufacturas (57,3%); azúcares y confites (3.339%), y café, té y especias (129,2%). De igual manera, la categoría de perlas y piedras preciosas presentó un aumento de 172,1%, al llegar a los US$60,3 millones.

Se destaca que el 84,2% del total exportado corresponde a la categoría de combustibles.

Carlos Ronderos, presidente de la Cámara Colombo China de Inversión y Comercio, argumentó que “si bien las ventas crecieron gracias a los precios del petróleo, hay sectores nuevos explorando oportunidades. Hace unas semanas el ministro de Agricultura, Juan Guillermo Zuluaga, con directivos de PorkColombia, estuvieron gestionando la admisibilidad fitosanitaria. La gran ventaja es que en China consumen partes del cerdo que en Colombia no se comen, como la cabeza y los pulmones, por lo que hay enormes posibilidades”.

Ronderos añadió que también hay espacio para un incremento en las exportaciones de flores y café, en especial para este último producto, ya que es una categoría que ha tenido un fuerte crecimiento entre los consumidores chinos.

Esto va de la mano de las cifras del Dane, en las cuales se percibe un aumento del 129,2%, entre enero y abril, en la categoría de café, té y espacias.

Por su parte, las exportaciones a Turquía pasaron de US$422 millones en 2017 a US$610 millones en el 2018; incremento explicado por las ventas de otras variedades de hulla. 

Y aunque el TLC con Israel no ha entrado en vigencia, mientras surte los pasos ante la Corte Constitucional, el ritmo de exportación avanza a buen ritmo, al pasar de US$83,6 millones en el 2017 a US$212,7 millones en este año.

La exministra de Comercio, Industria y Turismo, María Claudia Lacouture, contó que “para Asia hay oportunidades en agro, unas manufacturas y algunos textiles, sin embargo, debemos tener valor agregado. Al mismo tiempo lo que más se exporta es chatarra hacia este destino”.

Igualmente, hubo naciones de este continente que mantuvieron estables las compras a Colombia como Japón, con un aumento de 0,6%, comparado al año anterior, y otras que las redujeron, como Singapur (-66,6%) e India (-1,4%).

INVERSIÓN JAPONESA

Un informe de ProColombia reveló que entre 2010 y 2017, la inversión de Japón creció seis veces comparado con el periodo 2002 – 2009, al pasar de US$60,6 millones a US$363,1 millones, en capitales dirigidos a sectores no minero-energéticos como energías renovables, químicos, automotriz, manufacturas en herramientas, materiales de construcción, componentes eléctricos, distribuidoras de elementos deportivos, entre otros.

Además, según reportes de la Balanza de Pagos del Banco de la República, Japón lidera los flujos de inversión de Asia en Colombia y registra un acumulado de US$420 millones en el periodo del año 2000 al 2017.

Solo en 2017 la inversión japonesa en Colombia sumó US$63,4 millones, lo que representó un crecimiento de 241,7% con respecto a lo registrado en 2016. De acuerdo con Felipe Jaramillo, presidente de ProColombia, se espera que en los próximos dos a cinco años se incremente significativamente la inversión japonesa como un factor generado a partir del acuerdo para la eliminación de la doble tributación, trámite que fue convenido entre las dos naciones en diciembre de 2017 y que avanza en la aprobación interna del Congreso de la República en Colombia y de un consejo de ministros en la nación asiática”.

El convenio bilateral busca suprimir la doble tributación, además de prevenir la evasión y elusión y, contribuir con el crecimiento de la inversión entre ambos países. “Para Colombia, Japón representa una oportunidad de atraer desarrollo, tecnología y tecnificación a nuestros campos e industrias, para una mayor competitividad y generación de empleos”, agregó Jaramillo.

Vale recordar que actualmente los gobiernos de Colombia y Japón avanzan en la negociación de un Acuerdo de Asociación Económica (EPA).

CHANCES PARA MÁS INVERSIÓN

El documento de ProColombia, relacionado con la inversión japonesa en el país, recogió los sectores en los cuales hay más oportunidades de inversión del país nipón. Allí se destacan la agroindustria con aceites y grasas, acuícola, alimentos procesados, biocombustibles, cárnico, caucho, forestal, hortofrutícola y lácteos; manufacturas con agroquímicos, autopartes, empaques plásticos, ensamble, materiales de construcción y metalmecánico, y en servicios con los BPO y/o KPO, infraestructura y logística, servicios financieros y Telecomunicaciones. Hay más de 90 compañías japonesas presentes en Colombia, con compañías manufactureras, empresas de maquinaria y equipos, de servicios financieros, entre otras.

Fuente: PORTAFOLIO